07.03.2023
Mar Del Hoyo (1985) Nació en Barcelona y, además de ser actriz y directora creativa de su marca de joyas, se dedica a la cerámica.Fascinados por sus creaciones nos pusimos en contacto con ella para que hiciera la re interpretación de las formas de KALEOS en una escultura.
La visitamos en su maravilloso estudio (a estas alturas ya sabrás de nuestra obsesión por los espacios cuidados) para hablar con ella sobre su trayectoria creativa, su relación con la forma.
¿Nos puedes contar un poco sobre tu carrera creativa? ¿Cuándo supiste que querías seguir el camino creativo?
Siempre me he sentido atraída por el arte, la expresión y la creatividad, aunque de pequeña no lo relacionaba con una profesión. Sí recuerdo un momento concreto, cuando fui al cine a ver Todo sobre mi madre que pensé: “Yo quiero hacer esto, hacer sentir este tipo de cosas a las personas”. Creo que ahí tomé la decisión de querer ser actriz, y muchos años más tarde, después de ya tener una carrera más o menos consolidada, apareció la cerámica en mi vida por sorpresa, lo cual fue un auténtico giro de guión en mi vida.
¿Cómo empezaste a trabajar con cerámica?
Conocí por casualidad a una ceramista que era familiar de mi chico. Estábamos veraneando en Francia y nos invitó a su taller - ella hace unos jarrones y piezas increíbles-. Ahí me dio mi primer trocito de barro, con el que sin pensarlo mucho hice mis primeros pendientes. Fue como un flechazo, y cuando volví a Barcelona me apunté a clases de cerámica. En ese momento solo hacía pendientes, ¡parecía que no me interesaba otra cosa! Aunque a base de pruebas y errores fui aprendiendo sobre todo el proceso de creación. Poco a poco fui profundizando y me apunté a una escuela de arte, aunque en realidad siempre he tenido una parte autodidacta, aprendiendo con la práctica.
La cerámica, en ese sentido, invita mucho a ello porque puedes lanzarte sin tener mucha idea a nivel técnico, lo cual creo que activa mucho la creatividad.
¿Nos puedes contar un poco cómo empezó Levens, tu proyecto de joyería?
Todo llegó de forma casual y muy natural. Como decía, cuando empecé a hacer cerámica estaba obsesionada con los pendientes, por eso enseguida tuve una gran cantidad, y como Adrià, mi pareja, es fotógrafo-y la fotografía era parte de nuestra cotidianidad-,empezamos a hacer fotos a las piezas. Abrí una cuenta de Instagram para compartirlas y en poco tiempo empezaron a escribirme tiendas interesadas en venderlas desde diferentes partes del mundo. Así que el negocio empezó sin tener ningún plan, ni siquiera el propósito de hacer de esto una profesión. Simplemente, fui siguiendo lo que iba pasando, y resolviendo las necesidades que iban apareciendo en el día a día.
Esta manera tan orgánica de crear Levens en realidad marca mucho la personalidad del proyecto. Tiene que ver con el arte de fluir, de estar presente y atenta a lo que va sucediendo. Es algo muy vinculado a la improvisación, por lo que me conecta con “la Mar actriz”, creo que es la manera en la que mi creatividad se desarrolla.
¿Cuál fue tu primera impresión de KALEOS cuando te contactamos por primera vez?
Me parece una marca muy contemporánea, que representa muy bien el presente, y muy ecléctica también, porque tenéis una gran colección con mucha variedad de estilos que pueden encajar con diferentes gustos.
¿Qué conceptos tenías en mente al crear esta escultura para KALEOS?
Desde el inicio tuve claro que me apetecía jugar con los tamaños, que no fuese una escultura de tamaño realista. En cuanto a la forma, después de algunas pruebas jugando con lo literal y lo abstracto-como ya os he contado mi proceso parte mucho de la experimentación-me decanté por una opción muy abstracta y conceptual. Se trata deformas geométricas, pero con feeling muy orgánico, natural. Aunque a primera vista no dirías que es una gafa, puedes apreciar la forma descompuesta con sus diferentes elementos: un ojo que está detrás del agujero, una nariz donde se sienta la parte principal de una gafa, unas varillas. Se trata de una escultura interactiva, ya que la visión -y hasta el significado- depende del punto de vista de la persona. Además, el hecho de que sean partes independientes lo conecta con el proceso de creación y producción de cada gafa.
¿Cómo es tu relación con la forma?
Tengo una relación un poco particular porque me gustan las formas un poco imperfectas en realidad, no busco milimétrico. Para mí es muy importante también la combinación de las formas. Creo que cuando dos cosas encajan, se realzan la una a la otra.De hecho eso me parece lo más interesante a la hora de crear mis piezas, ¡cuando dos formas encajan siento que he encontrado algo!
¿Qué futuros proyectos tienes entre manos?
En este momento siento que tengo mucho por aprender. Van apareciendo cosas nuevas:técnicas, materiales... y me dejo llevar por lo que me llama la atención. Ahora, por ejemplo, estoy muy interesada en el cristal. De hecho, una de mis colecciones es con el borosilicato, un cristal que se trabaja de una manera particular, con fuego. Creo que tengo que seguir así, encontrando nuevas ideas y aprendiendo la forma de hacerlas realidad.
¿Hay algún otro camino creativo que te gustaría explorar en el futuro?
Creo que una vez empiezas a trabajar con las manos te das cuenta de que esto es un aprendizaje a largo plazo. ¡Después de años siento que todavía no sé nada! Obviamente que voy adquiriendo nuevos conocimientos y herramientas para llevar mis creaciones más lejos, pero siempre me siento en continuo proceso de aprendizaje. Y en el fondo creo que esto es lo que más me gusta, si sintiese que ya lo sé todo, perdería el interés. Al final es lo que es la vida, seguir aprendiendo con humildad es pura motivación.